Te presento al mundo

Para comenzar a hablar de la lectura, me gustaría empezar por los antecedentes, se dice que hace unos siglos a la antigua Egipto. Los egipcios desarrollaron sus jeroglíficos, un sistema pictográfico que representaba palabras y sonidos. Los jeroglíficos eran usados en monumentos y tumbas, y también en papiros, que eran rollos hechos de una planta llamada papiro. Estos textos no eran accesibles para todos; la lectura era una habilidad especializada, y solo unos pocos sabían descifrar estos complejos símbolos.
Hoy en día, leer es una parte integral de nuestras vidas. Desde libros impresos hasta pantallas digitales, la lectura sigue evolucionando. Pero, al mirar hacia atrás, podemos apreciar cómo el simple acto de leer y escribir ha cambiado el curso de la historia y ha abierto puertas a un mundo de conocimiento y creatividad.
Así que, la próxima vez que abran un libro o enciendan su lector digital, recuerden todo el viaje que ha recorrido la lectura para llegar a nosotros. 

En la antigua Grecia, donde el alfabeto griego, desarrollado alrededor del 800 a.C., se convirtió en un gran avance. Este alfabeto, que incluía letras para vocales y consonantes, hizo la escritura mucho más accesible y flexible. Los griegos comenzaron a registrar obras literarias, filosóficas y científicas que aún leemos hoy en día.

En Roma, el alfabeto griego fue adaptado y perfeccionado en el alfabeto latino que usamos hoy en día. La lectura y la escritura se convirtieron en herramientas esenciales para la administración del imperio y para la transmisión de ideas culturales y científicas.

Pero la lectura no era algo que todos pudieran hacer. Durante mucho tiempo, la habilidad de leer y escribir era reservada para unos pocos. Fue con la invención de la imprenta que la lectura comenzó a democratizarse y los libros se hicieron más accesibles, y la educación comenzó a extenderse a un público más amplio.

Hoy en día, leer es una parte importante de nuestras vidas. Desde libros impresos hasta pantallas digitales, la lectura sigue evolucionando. Pero, al mirar hacia atrás, podemos apreciar cómo el simple acto de leer y escribir ha cambiado el curso de la historia y ha abierto puertas a un mundo de conocimiento y creatividad.

Así que, la próxima vez que abran un libro o enciendan su lector digital, recuerden todo el viaje que ha recorrido la lectura para llegar a nosotros. 

Te-leo mucho.

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